En Cuclillas

Hay una esquina por la que no me atrevo a pasar. Ya los ejércitos se cercan, las hordas (...)El nombre de una mujer me delata. Me duele una mujer en todo el cuerpo. (Borges)

10.9.12

Ideas y Escaparates

Desde la ventana, oigo la sirena de un cole cercano y me pregunto cómo podemos permitir que sigan recortando en educación. Y no lo digo sólo por aquellos maestros y maestras que no se movilizan porque no se consiguenadayesmuchodinero mientras te enseñan las fotos de su último viaje por Europa, me refiero también a las familias que no oyen, no escuchan o me dicen a la salida del cole “¿Otra vez Huelga?” sin entender que yo que no tengo hijos, pierdo dinero por los suyos. Por los hijos/as de todos y todas. Los que tendremos o vendrán. No entiendo que la mayoría de la población no comprenda que están atacando la mejor de las educaciones porque estamos llegando “demasiados” a la Universidad. Recortan en educación pública mientras regalan nuestro dinero a la Banca, y una parte de la Sociedad no es consciente que están recortando el futuro de niños y niñas concretos, con nombre y apellidos, y el de quienes todavía no han nacido. El futuro de un país. Que sólo una educación Pública llena de recursos y posibilidades, crea una Sociedad pensante, crítica, activa y con capacidad de actuación. Me pregunto si es que quienes son insolidarios no estudiaron en la pública y no recibieron la mejor de las educaciones, o si es que no están orgullosos/as de la educación que recibieron. Desengañaos, treintañeros que os creéis clase media: la mejor educación es la Pública, aunque sea sólo por el proceso de selección del profesorado y porque no trabajamos de cara a un escaparate. Porque yo, cuando hago talleres todo el día, busco en internet recursos, me quedo horas programando, me reúno con el resto del profesorado, no duermo por las noches, invento problemas divertidos, doy abrazos y limpio heridas, enseño a hacer esquemas, atiendo lloros y corrijo expresiones, conecto cables y entrevisto familias, preparo bailes y borro líneas, ato cordones y pego murales, río y lloro, creo grupos de trabajo flexibles y cuadros de modificación de conducta, o peino coletas y muestro reglas de ortografía, no lo hago porque tenga que justificar el dinero que pagan unos clientes-padres/madres. Porque en el folleto del cole donde van sus clientes-hijos/as no pueden vender todo lo que yo hago en la Pública, porque yo CREO en lo que hago. Yo creo en la Educación Pública. Y la fuerza de las ideas vale mucho más que el dinero. Virginia Gijón Herrera. Maestra de la pública.(22 de mayo de 2012)